Das ist eine Frau

 

“Oprimidos los hombres, es una tragedia.  Oprimidas las mujeres, es tradición.”


Letty Cottin / Periodista y activista social

 

 

En la historia nos habíamos acostumbrado a ser invisibilizadas en todos los aspectos de nuestra vida, siendo el objeto mudo poseído por Él. 

 

Siempre hemos sido mostradas con la mirada de un hombre blanco heterosexual, nos han enseñado a ser sumisas y a vivir eclipsadas por nuestro padre, hermano o pareja.

 

Con el tiempo y el auge del feminismo en la situación actual, esta situación se ha ido atenuando, pero sigue sin desaparecer.

Ha sido hibridada con una nueva sociedad que presume de ser liberal pero que no llega a creérselo todavía. Las mujeres siguen siendo invisibilizadas por situaciones cotidianas, no solamente por el género masculino, sino también por el propio femenino;
y muchas siguen siendo invisibilizadas por sí mismas, falta de confianza y el arrastre de problemas que han sufrido en el pasado.

 

Mediante la fusión de la fotografía y la pintura se quiere remarcar lo ‘tradicional’ alienado a lo 'nuevo'; es decir los valores tradicionales arraigados por nuestra cultura como lo que nos han enseñado desde pequeños, lo moralmente aceptable, simbolizado mediante la carga matérica de la pintura, densa como los cimientos en los que se basan esos valores y sobre el rostro para generalizar el rostro de la mujer a un simple objeto, ya no es ella, vuelve a ser una cosificación.

 

En este proyecto se muestran los rostros ausentes de mujeres que han sufrido el soterramiento de otras personas y que aún, siguen luchando para poder despojarse de este peso.